PROBLEMAS CON UNA HERENCIA.
Nos ha contratado un abogado para que tasemos las obras de reforma en una vivienda situada en un pueblo del norte de Burgos.
La historia comienza hace mas de 50 años, cuando unos padres de palabra reparten una heredad.Dentro del patrimonio había una casa mas bien caseron que se repartió a dos hermanos. Al hermano le toco la parte del caseron donde estaba la vivienda y a la hermana la parte del caseron donde estaban las cuadras y un pajar.
El reparto fue verbal, la madre les reunió a los hermanos y antes de fallecer repartió en vida después de hacer una división en la que todos los hermanos estaban de acuerdo.
La hermana, cuando falleció la madre, empezó hacer obras en la parte del caseron que le toco.Reformo las cuadras y el pajar haciendo una vivienda en la planta primera y un garaje en la planta baja donde antiguamente se encontraban las cuadras.
Durante todos estos años la hermana con su familia iba al pueblo en verano y siendo la vivienda una segunda residencia como tantas otras que hay en los pueblos y mas en esa zona del norte de Burgos donde la belleza del paisaje es espectacular.Y desgraciadamente pertenece a lo que últimamente se conoce como la España vacia.
Cuando fuimos a inspeccionar las obras el abogado nos había facilitado algunas facturas de las reformas que se hicieron, tejado suelo pintura e.t.c.En esta primera vista lo primero que preguntamos aquí se han hecho muchas mas obras que las que figuran en las facturas. Para que se hagan una idea la cifra en las facturas era de 35.000 euros y lo que a primera vista había obras entre 75.000 y 85.000 euros.
Ademas de esto la vivienda el costo de venta rondaría los 10.000 euros.La primera de las dudas porque había obras superiores a las facturas nos imaginábamos que porque se pagaron en dinero negro,no era asi el marido de la hermana es un manitas y se pasaba las vacaciones arreglando la casa.Osea que parte de la reforma la hizo el marido de la clienta.
Y la segunda duda que le planteamos a la clienta es porque siendo una casa con un valor de venta de 10.000 euros o menos se empeñaba en meterse en pleitos contra su hermano.
La respuesta de la señora fue que ella no tenia años para esos disgustos pero lo que le habían hecho no se podía perdonar.
Si es verdad que muchas veces no es el valor económico lo importante, sino el valor sentimental y las emociones que se desatan después de una ofensas como la que siente la clienta.
Durante la inspección cuando estábamos en la segunda planta nos encerraron y ya empezaron las voces.
Afortunadamente alguien del pueblo aviso a la Guardia Civil y la cosa no fue a mayores.
Como conclusión final y por experiencia lo mejor es, aunque cueste, que se firmen los acuerdos y si se firman en una notaria mejor. La expresión yo no esperaba que me hicieran esto lo he escuchado tantas veces, como la expresión en vida de mi hermano esto no pasaría. Y es verdad una cosa es lo que ocurre entre hermanos y otra lo que ocurre cuando ese hermano no esta y están sus descendientes que no tienen la misma relación que había entre hermanos.